Para no ir demasiado lejos, solo me remontaré a la sección de cómics que existía en la previa versión de mi sitio de Internet. Sucede que una vez que me animé a hacer dicho sitio me puse a pensar que es lo que yo podría publicar en dicho espacio.
No tarde mucho tiempo en pensar en mis amigos y todas esas anécdotas graciosas que han sucedido cada vez que nos reunimos. Pero para darle un mejor sentido a las cosas imaginé que hacerlo a través de cómics sería un vehículo más gracioso y más divertido para hacerlo llegar.
Ese fue el surgir de la idea, la parte difícil estaba en realizar los dibujos, recuerdo haber hecho unos bosquejos en mi cuaderno de más o menos como es que esperaba que se vieran.
Desafortunadamente no tenía acceso a un scanner, y la verdad imaginaba que sería demasiado difícil dibujar una y otra vez a mis personajes a mano. Así que aplicando todas mis habilidades en el uso de Paint y haciendo uso de mi anuario de preparatoria, el resultado final fue el siguiente:
De derecha a izquierda: Mickey, Ades, Guardián y yo.
Y la primera historia fue una aterradora anécdota que no puedo contarles sencillamente intitulada “La Noche del Boggie Boggie.”
Dicho cómic resultó gracioso para todos los que lo han visto, y he pensado en publicarlo de nuevo, pero aún no me hago a la idea de hacerlo debido a que está cargado de tantos “chistes locales” que no todo mundo podrá apreciarlo (salvo aquellos que me conozcan a mí o a alguno de mi grupo de amigos en persona.)
Después de este, estaba trabajando en otro cómic, cuando repentinamente mi computadora se averió y tuve que formatearla, y aunque preservé la mayor parte de mis documentos, hubo algunas carpetas que no pude recuperar, y entre ellas estaba la carpeta que contenía el cómic aún en desarrollo y los dibujos sobre los cuales estaba basándome.
Nunca pude salir de esa frustración, muchas veces me tomaba toda una semana elaborar una sola página de los cómics, no se diga, perder todo de la noche a la mañana.
No pude soportar la idea de tener que hacer mis dibujos desde cero, así que pensé en manera alternativas de realizar mis cómics. Ideas como hacerlos a mano, escanearlos y colorearlos a computadora fueron una, así como finalmente poner a prueba mis recientes habilidades en el uso de Photoshop.
Pasaron varios años y cuando finalmente me dispuse a revivir mi sitio de Internet, la sección de cómics fue de lo primero que deseaba volver a hacer. Así que nuevamente vino el debate: ¿Cómo voy a hacer los dibujos?
En eso recordé una ocasión en la que una prima entró a mi habitación y me encontró dibujando el cómic anterior y me hizo el comentario de que “mis monitos se parecían mucho a los de ese juego en el que se la llevan partiéndose en la m…”
Y sí, así era, el diseño de mis personajes anterior estaba basado en gran medida en los personajes de “ese juego en el que se agarraban a m…” conocido aquí en América como River City Ransom.
De modo que pensé en finalmente cerrar el ciclo, y hacer los personajes totalmente basados en aquellos píxeles de Nintendo. Esto es algo que ya he visto en otros cómics en la red, de los cuales, una gran inspiración vino por parte del “Teatro de 8-bits” publicado en el sitio http://www.nucklearpower.com/, en el cual hacen uso de los personajes de los títulos de Final Fantasy.
De esta manera, tomé dichos píxeles y con algunos retoques aquí y allá para darles la apariencia mía y de mis amigos y listo… el primer cómic fue publicado:
Claro que si se iba a tratar de un homenaje a dicha serie, el nombre y el logo debían de corresponder a ello… y así:
Del logo y nombre original del juego.
Se creó el nombre y logo de mi sección de cómics.
En fin, la inspiración que sigue moviendo la elaboración de dichos cómics sigue siendo la misma, y creo aún hay espacio para mejorar esta sección en el camino. Mientras tanto aún existen algunas cuantas decenas de anécdotas, las cuales se suman al resto de las ocurrencias de mi vida diaria, llevándome a tener una cantidad (aparentemente) interminable de material, el cual varía entre sucesos de la vida diaria, los amigos, el trabajo, la familia, etc.
En cuanto al cómic de la noche del Boggie Boggie, no se preocupen… aún lo poseo en toda su gloria, y algún día lo traeré de vuelta a esta sección con algunos necesarios ajustes y debido material extra que harán de esta escalofriante historia digna de ser preservada… en píxeles…
No se preocupen… pronto estarán de regreso.
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