En esta ocasión tenemos éste cómic reciente de Last Place Comics, que es otra serie de esos cómics largos y extraños que suelen llamarme mucho la atención. La moraleja de hoy parece ser como sobre ponerse a esas conversaciones en las que algo fuera de lugar puede conllevar a un momento muy incómodo, especialmente con alguien que no conoces, la respuesta parece ser…¡sigue a ese extraño hasta el fin del mundo hasta que logres aclarar lo sucedido!
Hablando de conversaciones incómodas, si nos visitas de Facebook (por si no lo sabías, tenemos Facebook), gracias por seguirnos hasta acá, no me gusta emplear técnicas tipo “click bait” para conseguir visitas en éste blog, pero si hay varias razones por las cuales prefiero que leas los cómics aquí y no en alguna red social.
Una de las principales es por que las redes sociales se han vuelto un repositorio de contenido basura últimamente, y mientras no podemos prescindir completamente de éstas (hey, ¡gracias a las redes pudimos encontrar a mi perro que estaba perdido!), una de las razones por las que volví a realizar éste blog es para hacer un pequeño esfuerzo de poner algo de coherencia nuevamente en la red, más adelante hablaremos de ello.
De momento, si algo les puedo prometer es no atascar éste sitio de publicidad, ni hacerte perder tu tiempo con incoherencias. A menos de que sean incoherencias lo que buscas, porque con algunos cómics que tenemos aquí…tenemos un poquito de eso.