El otro día sucedió algo interesante. Al final del día, mientras cenábamos en el comedor familiar de siempre, vi pasar volando algo frente a mí y posarse después en una cortina frente a una puerta a la derecha de donde me encontraba comiendo.
Pensando que se trataba de uno de esos saltamontes con forma de hoja que ronda por aquí, observé la pequeña figura de color verde y no tardé mucho en reconocerla… era una mantis religiosa.